¿Como comunicarnos con nuestros hijos adolescentes?
COMO COMUNICARNOS CON NUESTROS HIJOS
La adolescencia es una época complicada y la comunicación entre padres e hijos se puede volver dificultosa y no saber como actuar con nuestros hijos adolescentes. Es importante tener en cuenta factores como :
Comunicación verbal y no verbal
Nos comunicamos con el comportamiento. Y lo hacemos con comportamientos verbales y no verbales.
El comportamiento verbal es usado para comunicar ideas o dar información, opiniones y actitudes, describir o expresar sentimientos, acuerdos o desacuerdos, hacer preguntas, pedir información, razonar y argumentar.
El comportamiento no verbal resulta imposible de ocultar. Tú puedes ocultar tus palabras, puedes decidir no hablar o comunicarte verbalmente, sin embargo, resulta imposible no enviar mensajes a través de tu cuerpo (expresión de la cara, mirada, postura, gestos, proximidad/lejanía, contacto físico, tono de voz).
En ocasiones la no correspondencia entre ambos mensajes, puede dar lugar a malos entendidos. Es importante que nuestros gestos acompañen a nuestras palabras para hacer de la comunicación una herramienta eficaz.
Muchas veces es mas importante la coherencia, que el propio mensa, ya que si decimos una cosa diferente con nuestras palabras y con nuestro cuerpo o nuestros actos nos restará credibilidad ante nuestros hijos, haciendo complicada la relación y por extensión la propia comunicación.
Cómo escuchar a nuestros hijos
Saber escuchar el lenguaje del comportamiento: unas lágrimas, una carcajada, una cara malhumorada, un portazo, hablan tanto como unas palabras.
Comunicarse adecuadamente: que los hijos se enteren de que aceptáis sus sentimientos, cualesquiera que sean, y por tanto, puedan manifestároslos si lo desean.
Darse cuenta de la importancia de escuchar: saber escuchar puede jugar un papel muy importante a la hora de estimular los sentimientos de autoestima y autoconfianza de vuestro hijo. Al escucharle, se le transmite mensajes como: “Tú eres una persona valiosa” o “Respeto tu punto de vista”.
Ser oyente activo: hacer un esfuerzo consciente y evidente por comprender y mostrar interés en lo que vuestro hijo está diciendo.
Cómo hacer que nuestros hijos nos escuchen
Contestar las preguntas que os hacen: ser lo más rápidos, francos y directos posible.
Si queremos que nos cuenten, tenemos que dar el primer paso y ser nosotros los que cuenten , al principio puede no dar resultado pero a largo plazo seguro que lo dará, ya que nuestros hijos están recibiendo un modelo, un ejemplo que comunica su forma de sentir, de pensar, las cosas que le pasan. Cuidado con preguntar mucho ya que convertirá la comunicación en un autentico interrogatorio, en el que nuestros hijos no se sentirán nada cómodos y tratarán de eludir estos momentos , con respuestas automáticas como monosílabos.
Saber escoger el momento adecuado: hay que tratar elegir un momento adecuado para tratar temas delicados.
Aceptar los propios límites: saber que tenemos derecho a no saberlo todo y a cometer errores.
Permitirles que no estén de acuerdo: dejarles expresar sus opiniones y argumentos y responder de forma comprensiva pero firme (evitar ser autoritarios).
Evitar el sarcasmo o la burla: humillar es una manera rápida de hacer que no nos escuchen. A nadie le gusta hablar o escuchar cuando se siente que lo van a derribar.
Cuidado con poner calificativos a los hijos: debemos evitar poner etiquetas a nuestros hijos ya que éstas pueden hacer que se comporten en función de algo que realmente no son.
Entender la adolescencia por lo que realmente es: nuestros hijos se encuentran en una etapa del desarrollo complicada. A los cambios fisiológicos que se producen en la adolescencia, hay que sumar los cambios en la forma de pensar y actuar. Es una etapa de diferenciación con la familia y búsqueda de apoyo entre los iguales. Por este motivo, es frecuente que se produzcan disputas relacionadas con la negativa de los hijos de cumplir con la disciplina de los adultos. Crecer no es tarea fácil, el lado inseguro de los adolescentes quiere sentirse protegido, y el lado aventurero quiere desarrollarse y hacer cosas nuevas.
No abandonar: si queréis que vuestros hijos os escuchen, ellos tienen que estar seguros de que vosotros estáis dispuestos a escucharlos a ellos. Si queréis que cuenten tienen que ver que vosotros estáis dispuestos a contar.
Un post muy interesante. La comunicación es la base de la confianza.
Me alegro mucho de que le haya gustado. Un saludo